Design Thinking: qué es y qué etapas tiene

El diseño está por todas partes y el design thinking es justo lo que necesitas para llevarlo al siguiente nivel. ¿Todavía no sabes en qué consiste este método y todo lo que puede hacer por tu proyecto? Acompáñanos para despejar todas tus dudas. 

Design Thinking: Definición y características

Llamamos design thinking a la metodología que emplean los diseñadores para dar solución a los problemas de los clientes. Así, se parte de las necesidades reales de estos para satisfacerlas de la forma más creativa e innovadora posible. 

  • No podríamos entender qué es el design thinking sin atender a su fuerza motriz: el cliente. De hecho, esta forma de trabajar pone las necesidades del consumidor en el punto de mira. Por ello decimos que es human-centered design (diseño centrado en lo humano).

  • La versatilidad es una de las grandes virtudes del diseño design thinking. Ciertamente, esta metodología puede emplearse en todo tipo de sectores y permite desarrollar cualquier cosa: desde un producto o servicio hasta una startup.

  • La preeminencia de la acción sobre las ideas es otro aspecto fundamental a la hora de comprender qué significa el design thinking. Ciertamente, la experimentación y las demostraciones cobran una importancia decisiva dentro de esta metodología. 

Etapas del Design Thinking

La mejor forma de explicar en qué consiste el método design thinking es estructurarlo en cinco fases sucesivas. Por ellas pasaron negocios tan exitosos como Airbnb o Netflix y no les fue nada mal. ¿Te animas a seguir sus pasos?

Empatizar

Lo primero que debemos hacer como equipo encargado del design thinking es ponernos en la piel del buyer persona. Se trata, pues, de clarificar con objetividad cuáles son sus pensamientos, sentimientos y necesidades.

Las técnicas que podemos emplear para llevar a cabo esta investigación del público objetivo son muy variadas: desde minuciosas entrevistas hasta resolver las 5 W: qué, quién, cuándo, dónde, por qué y cómo.

Definir

Cuando ya nos hemos informado exhaustivamente sobre nuestro público objetivo o target, toca identificar con precisión cuál es el problema que estamos llamados a resolver. Una vez dilucidada dicha necesidad teórica deberemos comprobar que la misma realmente existe en el mercado.

Idear

Llegó el momento de agudizar nuestra creatividad al máximo realizando una sesión de brainstorming para generar el mayor número de ideas posible. Lo siguiente será seleccionar aquellas que mejor encajen con una solución realista al problema que hemos definido.

Prototipar

En esta fase del diseño design thinking deberemos materializar la idea resultante del brainstorming. Para ello se realiza una maqueta que haga realidad la solución que habíamos ideado. Esta etapa resulta clave para comprobar su utilidad y pulir los detalles.

Probar

La última etapa de este método consiste en testear el prototipo para asegurarnos de que realmente cubre las necesidades de nuestros consumidores finales. A tal fin se les da a probar la maqueta del producto o servicio y se toma nota de sus observaciones.

En definitiva, el design thinking te permite resolver problemas complejos de una forma original y altamente satisfactoria para tus clientes. ¿A qué esperas para implementar esta metodología en tu empresa? .